Quevedo

Quevedo
PULSA SOBRE LA IMAGEN (GLOG)

martes, 4 de diciembre de 2012

Silencio

Son las palabras que nunca dijistes las que me molestan. Acudo cada mañana al periódico, buscando una pista que me indique aquello que nunca hablaste. No me hablaste nunca del tiempo, de la llovizna negra que tiznaba los tejados en los que maullaba la gata en celo; no comentaste nada de la sonrisa impostada de la artista de moda, en cada hoja de cada revista de cada kiosko de cada paseo de tus pasos por la calle atestada. No me hablaste del color caqui, o rosa chicle, o azul marengo, o no sé qué tono de gris o blanco de la camiseta que compraste en rebajas. No me indicaste cómo sintonizar la TDT, ni programar la lavadora, ni buscar bolas de pelusa bajo el sofá con la escoba imán más poderosa del mercado. Nunca dijiste nada y te callaste. Te callaste, luz oscura en alcoba helada. Te callaste. Y lo más triste es que tienes nombre de mujer: Rebeldía.